Usos sociales, rituales y actos festivos

  • Maranfallos

    Los maranfallos son una manifestación que se realiza en la época de los entroidos o carnavales en el pueblo de Burbia. Actualmente, los maranfallos salen a las calles el sábado de carnaval, y en algunas ocasiones los martes. Pero antiguamente, lo hacían durante toda la semana y, algunas veces, de una forma muy agresiva. La característica principal de los maranfallos es la persecución que se realiza a las personas que no van vestidos como ellos o con la cara cubierta, ya que la regla fundamental es mantener el anonimato. Para ello se tapan la cara con cualquier elemento que no permita identificarlos, ya sean caretas, trapos, capuchas, etc. Además, en muchas ocasiones deforman sus cuerpos introduciendo trapos en sus ropas e incluso cambiando su forma de caminar para que nadie pueda reconocerlos.
  • Danza de Peranzanes

    Las danzas de Fornela tienen una amplia tradición. Se dice que son danzas de guerra, por lo que habitualmente son danzadas por hombres. Los danzantes de Peranzanes bailan la mañana del 15 de agosto (a eso de las 11) en el campo del Santuario de la Virgen de Trascastro, patrona de los fornelos. El día 16 lo hacen por la tarde, mientras que el día 17, danzan en su pueblo, Peranzanes. En el caso de los danzantes de Chano es a la inversa. La danza de Peranzanes se compone de 8 o 12 bailarines y un tamboritero: 1º y 2º juez, cuatro “segundas”, cuatro “panzas”, dos “guías”, dos “chaconeros”, dos o tres “palilleros” y un tamborilero o “tamburiteiru”. Como decimos, tradicionalmente todos son hombres jóvenes, de entre 14 y 27 años.
  • Magosto

    Es una celebración, a veces espontánea y a veces organizada, que tiene lugar en los meses de otoño, durante la temporada de recogida de castañas. Se trata de un evento similar al de un filandón, cuyo protagonista principal es la castaña asada. Es una reunión nocturna entre diferentes individuos de la comunidad cuya finalidad es la de socializar. Normalmente se hace alrededor de una hoguera en la que hay un “tambor”, un recipiente cilíndrico con agujeros dentro del cual hay castañas que se van tostando en las llamas.
  • Volteo manual de campanas de San Nicolás el Real

    El volteo manual de campanas se lleva a cabo todos los días de la novena previa a la festividad del Cristo de la Esperanza (14 de septiembre, día de la Exaltación de la Cruz). Cada tarde, a las 19:30 h., se ejecutan tres volteos consecutivos, con un intervalo de separación de unos 15 minutos entre cada uno. Cada campana comienza su volteo siguiendo un orden determinado, desde la más pequeña hasta la más grande. El propio día de la fiesta del Cristo, además de los tres volteos para anunciar la celebración eucarística, se ejecutan otros dos a la salida y entrada en el templo de la talla del Cristo, de manera que esta esté siempre acompañada por el sonido de las campanas mientras se encuentre en el entorno del edificio.
  • Romería de Santa Marta

    La romería de Santa Marta no solo se celebra por ser la patrona de Vilela, sino también ser la abogada de los niños. Uno de los elementos fundamentales de esta romería es precisamente ese, el ofrecimiento de los niños a la virgen que, en unas ocasiones se realiza para sanarlos de una enfermedad y, en otras, para protegerlos. El día de Santa Marta, que va precedido por una novena se realizan una serie de misas a lo largo de la mañana, siendo la más importante la denominada misa mayor. A las 12 de la mañana comienza la procesión, que recorre varias calles cercanas a la iglesia. Los portadores de la virgen suelen ser las personas que se ofrecen a Santa Marta, teniendo preferencia estos ante los demás. Años atrás, los portadores solían ser los quintos. Una vez se inicia la procesión, las personas inician el ritual para obtener la protección o sanación de la Virgen. Este ritual consiste en pasar varias veces por debajo de ella, mientras la imagen avanza en procesión. Las personas pasan una tras otra desde delante hacia atrás, teniendo en ocasiones que ir apartando a la gente para poder avanzar. Una vez que la imagen llega de nuevo a la parroquia, los niños se disponen sentados delante del altar para dar comienzo la misa, que ese día se oficia al aire libre en el recinto de la iglesia . Años atrás, se vestía a los niños ofrecidos con una especie de mortajas blancas que portaban durante la celebración.
  • La Octava

    La Octava se celebra en la localidad de Peranzanes el domingo de Corpus. Tradicionalmente, cada año tenía lugar en una casa particular de uno de los vecinos del pueblo, que adornaba su casa, preparaba un altar para recibir al cura, que acudía a rendir culto al santo. Mientras en la casa del vecino se ultimaban los detalles para acoger la celebración, el cura iba desde la iglesia a dicha casa en procesión, acompañado de cuatro feligreses que portaban el palio que cubre al párroco. Al llegar a la casa, los niños que allí habitan reciben a la imagen portada por el sacerdote y a la comitiva tirándoles pétalos de flores. Es entonces cuando el párroco se arrodilla frente al altar y reza a la imagen ante la atenta mirada de los anfitriones y de los vecinos. A continuación, se regresa a la iglesia, donde tiene lugar una misa y se vuelve de nuevo a la casa anfitriona a comer pan y vino. Actualmente, el ritual es el mismo, con la diferencia de que es la Junta Vecinal la encargada de organizar la festividad. Así, se escoge un lugar neutral para recibir al sacerdote, como la plaza del pueblo, que es el lugar habitual de celebración. Ahora se hace así dada la falta de “voluntarios” para acoger la celebración, bien sea por la responsabilidad que supone, o bien por la falta de vecinos presentes el día de la festividad. Se trata pues de una medida de salvaguardia.
  • Danza de Chano

    Las danzas de Fornela tienen una amplia tradición. Se dice que son danzas de guerra, por lo que habitualmente son danzadas por hombres. Los danzantes de Chano bailan la tarde del 15 de agosto (a eso de las 17h) en el campo del Santuario de la Virgen de Trascastro, patrona de los fornelos. El día 16 lo hacen por la mañana, mientras que el día 17, danzan en su pueblo, Chano. En el caso de los danzantes de Peranzanes es a la inversa. La danza de Chano se compone de 12 bailarines: 1º y 2º juez, 2 “guías”, 4 “segundas” y 4 “banderas”, además de dos “chaconeros”, dos o tres “palilleros” (habitualmente niños) y un tamboritero. Como decimos, tradicionalmente todos son hombres jóvenes.
  • Entroido de Villar de Acero

    El entroido de Villar de Acero es una festividad propia del tiempo de los carnavales, justo antes de comenzar la cuaresma. En las vísperas de del entroido, sobretodo los domingos, las mozas y los mozos salían a la calle en lo que se denomina “correr o entroido” esto consiste en que después de comer, salían de sus casa y unos mojaban a otros además de tirar puñados de cinsa (ceniza) y fariña (harina). También durante esos días, una vez oscurecía, los niños pequeños “facían os vellos” que consistía en vestirse con ropas viejas del desván con una media en la cabeza y corrían detrás de la gente para darles con una vara. Durante estas persecuciones, los otros niños iban cantando una copla con la siguiente letra: Vello raiouco nacido no couto, Vello raiouco nacido nun couto. El día del entroido. El día del entroido, la gente se viste con las ropas viejas que tenga a mano y van recorriendo las calles del pueblo pidiendo por todas las casas. Normalmente lo que se solía pedir eran huevos y chorizos, como dice la canción que cantan delante de cada casa: Los carnavales se vienen, Los carnavales se van Y nosotros marcharemos Y no volveremos más A estas puertas venimos Dispuestos para cantar, Denos huevos o chorizos, Que Dios se lo pagará. Quedese con dios señora Que nosotros ya nos vamos Que los días son pequeños Y tenemos que aprovecharlos.
  • Entroido de Valtuille de Arriba

    Celebración con motivo del carnaval que precede inmediatamente al tiempo de cuaresma. Al ser esta una época de recogimiento y abstinencia, el entroido alberga ciertos excesos y descontrol. Esta celebración tiene como elemento principal la figura de un hombre de paja que personifica el entroido. Esta figura solía construirse con paja de centeno que los mozos iban recogiendo por los mederos y palleiros del pueblo hasta conseguir la cantidad necesaria. Una vez en la plaza, se hacía un agujero y se clavaba un poste de madera de gran altura (hasta ocho metros según las fuentes), y clavado a su vez en este, otro haciendo una forma de cruz que sirve de estructura para los brazos. A la figura en algunas ocasiones se le daba forma cónica y en otras, se le ponían “unas patas escarrancadas” o piernas abiertas. La cabeza está compuesta por un saco de papel relleno de paja al que se le pinta una cara. Una vez construida la figura, que solía hacerse el sábado de carnaval, esta permanecía allí hasta el martes, día en el que se le dará juicio. En este juicio las personas se subían a la figura con una escalera y desde allí arriba unos hacían alegatos a favor y otros en contra para ser o no quemado. En estos alegatos se podían usar cualquier tipo de recursos, siendo críticas a eventos y problemas de actualidad o cosas de la vida cotidiana.
  • Hoguera del Sábado de Pascua

    Hoguera que se realiza el Sábado de Pascua a partir de la media noche con motivo de la celebración de la resurrección de Cristo. Horas antes de medianoche, las gentes recogen leña por las casas del pueblo para juntarla en la plaza (antiguamente se celebraba en el puente). Una vez dan la medianoche, se enciende la hoguera y se empiezan a tocar las campanas de la iglesia durante un tiempo indeterminado. Según indica la gente, puede alargarse durante toda la noche o solamente durante unos minutos. Es típico acudir a la hoguera con unos trozos de tocino o chorizos para asarlos en el fuego pinchados en un garabullo (palo con punta). En otra época, ya avanzada la noche, los mozos del pueblo daban inicio a las trastadas. Estas consistían en sacar los arados de las casas y colgarlos de los árboles y también tirar los carros a los subiaos (cunetas).
  • La subasta del Santo

    Cada Jueves Santo, en Balouta, es tradición cubrir al Santo (el patrón del pueblo, Santiago Apóstol), como ocurre en muchas localidades en las que se celebra la Semana Santa. En este caso, se tumba delante del altar, sobre una sábana y una almohada, y se cubre con una casulla con colores morados. El Santo permanece en la iglesia, ante el altar hasta el Viernes Santo. A lo largo de estas horas, los vecinos de Balouta y alrededores acuden a la iglesia a hacer ofrendas al Santo, en forma de alimento o dinero, principalmente. El Viernes Santo es día de fiesta en Balouta, puesto que a mediodía se levanta al Santo, vuelve a su lugar habitual dentro de la iglesia y se recoge todo lo que la comunidad le ha ido ofreciendo. En la puerta de la iglesia se subasta todo lo recaudado entre los vecinos con la finalidad de obtener recursos para el pueblo y el edificio de la iglesia.
  • Limosna a los difuntos

    Antiguamente no existían las empresas funerarias, de manera que los velatorios tenían lugar en la casa doliente. Esta costumbre se ha mantenido a lo largo de los años en las zonas rurales, hasta hace unas tres décadas, aproximadamente. Esta costumbre consistía en velar al fallecido desde que moría hasta su entierro. También por las noches acudían las mujeres a rezar el rosario y acompañar a la familia en las duras horas previas al entierro. Ahora, en cambio, se reza el rosario en la puerta del difunto el día previo al funeral. En los pueblos del Valle de Ancares, como en muchos otros lugares, era común que la familia del difunto recibiese una limosna por parte de los vecinos del pueblo, sin importar su relación, si se llevaban bien o no. Siempre se daba una pequeña cantidad de dinero a los familiares del fallecido. En Pereda esta costumbre sigue viva. Se da con mucha menos frecuencia, pero es la única localidad en la que se ha documentado que se continúe con esta costumbre. Ahora se da una cantidad simbólica, normalmente un euro, unos días después del entierro, como se recuerda que se hacía antaño.
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